martes, 31 de agosto de 2010

Florecer mirandote a los ojos

A veces, quisiera ser más real. Reírme con mi mejor sonrisa frente a vos. No titubear.
No dudar. Volverme auténticamente yo. Sacarme la careta. Enseñarte mi parte más dócil, más vulnerable. Más amable y menos burda.
Menos narcisista, menos interruptora, menos febril.

Dejar de pretender que a veces tu piel no me vuelve loca.
Y pretender que no sé, que jamás seríamos cómplices.
Dejar de poner mi mayor empeño en hacerte creer que sí soy así
Y pretender que quizás, me querrás como soy de verdad
Dejar de ser tan fría, tan otra que no soy yo
Y pretender que queres, pero temes verme tal cual soy
Prometo no quedarme en la complacencia, prometo no quedarme a mitad del querer. Esperaré día sobre día, las flores que te pedí con la mirada, mientras no hacía falta hacer puntitas de pie, porque estabas en esa misma latitud espiritual.
La canción puede ser mujer, vida y aroma al mismo tiempo.
Prometo no darme por vencida, no creer tus mentiras, no resignar, no engañar.
Cada día, cada noche, más yo. En tu colchón ajeado o en el mío a estrenar de amor.
Respeto y congruencia. Paciente y ávida. Vivaz, siempre vivaz.
Prometo hacer retratos de nuestras sonrisas, de nuestra piel, de nuestros senderos curvos, de nuestros huecos más visibles.
Prometo reconocer siempre el camino de tu piel a tus ojos y de tus ojos al alma.
Compañera y leal. Piadosa y decisiva. Bonita, siempre bonita. De noche y de mañana.
Vas a volar conmigo, de mi mano, mirándome florecer.
Viendo como el sol de esta ciudad me hace germinar. Tu sonrisa será como una ducha en el infierno. Fortalecerás mis decepciones, mi autoestima y mis huesos.
Me verás siempre nueva y destinta, pero conocida, entregada y Carla.
Siempre yo….con vos.

lunes, 30 de agosto de 2010

Pupurrula...

No podría decirlo con mejores palabras...




Mañana ya casi pasa...Agosto solo tiene 31

Casi

Peor que la convicción del "no" es la incertidumbre del "tal vez", es la desilusión de un "casi".
Es el casi el que incomoda, entristece, que mata trayendo todo lo que podría haber sido y no fue.

Quien casi ganó, todavía juega, quien casi murió está vivo , quien casi amó, no amó.
Basta pensar en las oportunidades que se escurrieron, en los chances que se pierden por el miedo.

Me pregunto a veces qué nos lleva a elegir una vida tibia.
Si la virtud estuviese en medio término, el mar no tendría olas, los días serían nublados y el arco iris en tonos de gris.
La nada no ilumina, no inspira, no aflige ni calma, apenas amplia el vacío que cada uno trae dentro de sí.
Ni la fe mueve montañas, ni todas las estrellas están al alcance, pero preferir la derrota previa a la duda de la victoria es desperdiciar la oportunidad de merecer.
Para los errores existe el perdón, para los fracasos, oportunidad, para los amores imposibles tiempo.
De nada sirve cercar un corazón vacío o economizar el alma.
Un romance cuyo fin es instantáneo o sin dolor, no es romance.
No dejes que la melancolía sofoque, que la rutina acomode, que el miedo te impida intentar.
Desconfía del destino y cree en ti. Gasta más horas realizando que soñando, haciendo que planeando, viviendo que esperando, porque aunque quien "casi" muere está vivo... quien "casi" vive ya murió.-

viernes, 27 de agosto de 2010

Infinito Punto Negro

Igual que el veranito en mitad de Julio. Como un desayuno en un bar un miércoles de semana, los minutos libres entre las clases de la facultad. Como una tormenta en pleno verano, como tu voz convertida en susurro en mi oído al cantarme esa canción, como la felicidad de algunos días.
Efímero y fugaz. Y me aterro de solo imaginar la mañana en la que despierte y ya no estés.
Y tener que borrar los pasos caminados, borrar lo escrito, desandar lo andado, olvidar lo que he aprendido y esconder los portarretratos de tu sonrisa.
Necesito cosas sin fecha de caducidad, cosas perennes, perdurables.
Como tinta que no se borra, como papel que no se queme, como amor que no se mate.
Que la alegría me fecunde y se quede aquí para siempre, viéndome crecer.
Que no huya cual cobarde.
No puedo soportar ni una sola despedida más. Ni una muerte más. Ni otra noche en un hospital. No quiero más aeropuertos, ni salas de espera ni muertos, ni abandonos ni decepciones. No soporto la idea de pensar que algún día nos volveremos extraños.
Alguien debería sancionar al tiempo por exceso de velocidad. Alguien debería hacer leyes para que los besos duraran la eternidad.
No quiero ningún otro final si no tiene pensado ser feliz.
No quiero.

jueves, 26 de agosto de 2010

Mi msn y yo

Sí. Me cae pésimo :

-La gente que te saluda en el msn con un “holiss” (holiss? naciste ayer idiota?!),
o bien con un: “ola!” (Se te olvidó la h…gil!)
ni hablar del: “holaaaa!!!!!” (Y desde cuando tanta euforia para saludarme??!)
-Me cae pésimo la gente que amaga ocho veces en irse antes de concretarlo. (no es tan difícil loco! Decí me voy….y andate!, no me rompas las bolas cada un minuto para anunciar tu partida)
-Me saca de quicio la gente que usa tres emoticones por renglón. Ok. Si. Entiendo que en el msn no se puedan transmitir los gestos…pero un emoticon, si no es el correcto y en el momento preciso, no me transmite más que una idea clara de que algo te falla.
-Detesto profundamente que me dejen hablando sola. Osea…entendelo, no tengo la bola de cristal para saber si te fuiste al gimnasio, a bañar o te pusiste a cocinar y dejaste el msn abierto. Si vas a dejar de participar en nuestra conversación de un momento a otro…tene la mínima decencia de avisar. Mínimo.
-La gente que no entiende que por mas que sea una ventana de chat, el castellano sigue siendo castellano y el idioma es algo que no se basurea. No jodas loco. Te banco que abrevies cada una de las palabras, pero que no me pongas las comas y que te tragues los puntos, me hace súper difícil entender si es pregunta o afirmación. Tengo que adivinarte el sentido correcto de cada frase. No es que pido tildes, mayúsculas y sangrías…pero mínimo…expresate.
-Si tu “estado” es ausente, no vale que te enojes, te ofendas o me hagas planteos de porqué no te salude primero yo..
-Y por último…si te hablo, te zumbo o doy señales de estar del otro lado de la pantalla y estas viendome…contesta tontito!!
Lo admito. Hoy debo estar mala..o muy irritable.

miércoles, 25 de agosto de 2010

De muy de mañana...

Y no será tu recompensa más sí tu castigo.

Porque cuando vengas a mi, te sostendré la mirada. Ciega y profana.
Voy a rasgar tus vestiduras con un silencio impropio. Voy a lamer cada parcela de tu cuerpo. Voy a reposar mi aliento caliente, mi saliva húmeda sobre tu piel.
Voy a recorrerte la espalda con mis brazos en algo parecido a un abrazo, mientras absorbo poco a poquito cada molécula de tu ser.
Voy a dejar que reposes tu cuerpo sobre el mío. Voy a apoyarme con fuerza tu sexo febril sobre la pelvis ardiente y húmeda.
Y voy a arañarte la espalda mientras siento tu lenga lamiéndome.
Voy a hablarte en el idioma del tiempo y la distancia hecha trizas. Voy a llevarte al extremo conmigo. Voy a saborearte y también a devorarte. Voy a exigirte, absorberte y apresarte.
Dibujaré con mi saliva, círculos de baba espesa, morderé tu cuerpo, besaré tus labios.
Dejaré que te sientas gobernante en el terreno de mis pechos. Dictaminando batallas entre mis nalgas, contra mi cola, que se alzará gloriosa sobre el colchón para darte lugar a contenerme por ambos flancos.
Voy a hacer con tu cuerpo un cuatro. Y acomodaré mi cuerpo pequeño entre tu silueta para poder frotar mi mayor intimidad contra tu miembro. Para poder sentirte tan adentro como si fueras una parte de mí.
Voy a amarte y voy a atravesarte. Voy a perderme tanto dentro de vos que me sentirás como parte de tu todo. Respirarás a mi. Voy a vaciarte solo para volver a llenarte.
Con gritos de clemencia voy a suplicar que te vengas dentro de mí. Para saber más a ti cuando mi lengua humedezca mis propios labios la mañana siguiente.
No habrá ni un solo rincón de mi cuerpo donde no quepas, no habrá una sola línea sin recorrer. Ni un solo verbo obsceno sin pronunciar. Ni un solo amor por sentir.
Y sabrás por fin, que has logrado lo que muchos han intentado.
Hacerme tuya más que de mi misma.

lunes, 23 de agosto de 2010

De vos en mi...

Saliste de vos para venir conmigo
Saliste de vos para estar conmigo
Viniste de vos para estar en mí

Te hiciste más yo que de vos mismo

Me absorviste para verte tal cual yo soy
Y succionaste de mi lo que soy para mantenerme…
                                                                                 para sentirme dentro de vos

domingo, 22 de agosto de 2010

Grandes descubrimientos II

Vos y yo,
es lo mismo que
                                                 nosotros ?

viernes, 20 de agosto de 2010

Prodíga (me)

Enviame un mensaje. Devolveme las letras. Decime que no es tan terrible. Contame que te alegras de la sonrisa que me roba con solo nombrarlo.
Dame permiso para reestrenar nuestra cama.
Concedeme los minutos para besarlo, desnudarlo y amarlo por al menos dos horas.
Despedazame las corazas solo para ser mas bonita y pura.
Decime que no lastimaré tu imagen por atreverme a jugar con él como jugué con vos.
Acaso su alma sea noble y no abuse de las cordialidades.
Permitime a través mío, de ellos y de él, saber que volver a amar no es traicionarte.
Afirmame
Certifica que por volver a intentar no me perderé o te perderé
Jurame que no te olvidaré
Cuidame (de vos, de mi y de él)
Confesame que sabes que nunca jamás otro hombre será lo que fuiste para mi.
Abrime los limites, expandime los sentidos
Quereme
Seguí siempre siempre visitándome en mis sueños de Agosto
Enseñame en otra piel todo lo que me enseñaste con la tuya. Permitime besarle los labios, los parpados y el cuerpo entero.

Deja que me sienta cómoda con dejarlo entrar en nuestra casa
Hoy es viernes, es 20 de Agosto. Invierno con primavera que se asoma y nos da un calorcito inusual e inesperado.
Hoy es sábado de otro año. Y se avecina el peor día del año.
Hoy ya no estás, pero sigo consultando con vos las cosas que siento.
Ya no estas y empiezo a pedirte permiso para seguir viviendo.
Porque aunque me duelas como siempre vas a dolerme, he aprendido que es necesario seguir.
Si ahora me meto en la cama y me voy a dormir, es solo para que me susurres bajito al oído mientras duermo, que todo estará bien mi amor.

Por detrás te busco

Te busco.
No en tu nombre, si lo dicen,
no en tu imagen, si la pintan.
Detrás, detrás, más allá.
Por detrás de ti te busco.
No en tu espejo, no en tu letra,
ni en tu alma.
Detrás, más allá.
También detrás, más atrás
de mí te busco. No eres mas que
lo que yo siento de ti.
No eres
lo que me está palpitando
con sangre mía en las venas,
sin ser yo.
Detrás, más allá te busco.
Por encontrarte, dejar
de vivir en ti, en mí,
y en los otros.
Vivir ya detrás de todo,
al otro lado de todo
-por encontrarte-
como si fuese morir.
                                                                                           (Pedro Salinas)

jueves, 19 de agosto de 2010

Grandes descubrimientos

Hoy me dí cuenta que son tan pocas las personas con las que “no me da lo mismo” que me sentí como una mezcla de sensaciones.

O soy una ingrata, o muy complaciente o una hija de puta.

martes, 17 de agosto de 2010

Ojalá

Que disimulemos cómplicemente mis puntitas de pie para besarte y acomodarme en tu cuerpo cálido.
Que riamos incansablemente hasta de las cosas más absurdas.
Que nunca dejes de cuestionarme, de pedirme, de exigirme. Que no te olvide. Que no te olvides. Que te enamoren mis semejanzas y también mis diferencias.
Que mi piel jamás te resulte ajena aun a pesar del paso del tiempo.
Que siempre pueda recocerme en tu mirada.
Que tus manos sean siempre gentiles en el despertar matutino del amor.
Que la música nunca deje de sonar.
Que las palabras no acaben, que siempre tu deseo me sea correspondido, que no haya distancias ni husos horarios que aprender.
Que todos los fines que tengamos, sean siempre fines de semana, que vayamos poco a poquito, aprehendiéndonos. Que siempre siempre que haya ganas, haya tiempo para que,  mientras me hablas de corrido, yo te mire así como te miro y me vuelva más boba por tu sonrisa y por tu voz.
Que mis sábanas acaparen en dos noches tu olor para desperdigarlo por mi cuerpo durante un mes.
Que nunca haya más reglas que la libertad para relacionarnos. Libertad de decir, de sentir y de hacer. De libertad libertina.
Que nunca nunca se te acaben las formas de llegar hacia a mi. Que a veces me traspases, otras me abraces y otras solo me mires. Me sientas y me calles.
Que a veces me ames, que a veces me ates, que a veces me odies, me maldigas y me vuelvas a querer.
Que no tomes al pie de la letra todo lo que digo…ni todo lo que niego.
Que haya fotografías, arena y ríos. Que haya primaveras y veranos en todos los años. Que tu adolescencia tardía no me duela.
Que me sorprendas siempre como hoy. Y que te quedes en mi para siempre. Aunque de vos me vaya pronto.

lunes, 9 de agosto de 2010

Solamente mía

Como te clavaste en mí, como me atravesaste, como llovía, como te hundiste en mí, en mi cuerpo, en mi placer, en mis ganas, en mis gritos, en mi saliva húmeda, en la noche de truenos que gemían al pasar como nosotros.
Como se curvo mi espalda y tu pecho, como se arrodillo mi cintura, como se contrajo mi pubis, mi sexo, mi carne, mi piel, mis jadeos.
Como besaron los labios, las manos, los sexos, los genes, como giró la luna y la tierra se estremeció de placer…
Esgrimí una duda temprana, rendida en el paso del tiempo que me hizo salvaje, en una oscuridad que me anuló la vista y enloqueció mis cinco sentidos vivos.
Que duda maldita, que despropósito el de tu cuerpo.
Despropósito de revelarse ante mí con tal desparpajo, cual soldado dispuesto al ataque en una guerra feroz, salvaje, decisiva y desmesurada…desmesuradamente bella, concreta, violenta, verdadera y temible.
Mis manos primero, besaron las tuyas primero. Luego siguieron mis brazos torpemente rodeando tu cuerpo casi virgen, se siguió mi saliva bajo tu cuero, tu cuerpo, tu cuello, tu pecho, tu ombligo, tu pubis, tu falo, tu virilidad.
Con mis manos, con mi lengua, con mis labios, con mis pechos…abrigaba con mi esencia, tu cuerpo desnudo, para que la luna osada que entraba por tu ventana no tocara un solo rincón de tu desnudez.
Cómo abrigó mi boca húmeda tu miembro erecto y tieso, como degustó mi saliva mojada cada sabor de tu ser.

Sentí tus manos aferrarse de mis cabellos para enseñarme el camino de tus placeres quizás, para desahogarte de tanta prisión sino, y de seguro por tenerme sicalíptica. Mas sumisa e impúdica.
Acabó mi lengua por absorberte el clamor, por redimirte del verbo existir.

Y todo giró de repente. Con delicada violencia maniobraste mi cuerpo pequeño dejándome ciega con la mirada perdida hacia el sur y descifré como tu lengua iba cubriendo de baba espesa y caliente toda mi piel, como tu labios se hundían profundo y ferozmente en mis intersticios, como se humedecía todo mi cuerpo compungido y extasiado. Como tu boca osada, conquistaba mi pubis hasta retorcerlo de placer, como te hundías en mi cause como devorándolo, como ingiriendo mi savia, como bebiendo mi vida, como una fiera indomable devorando su presa. Y me perdía al unísono de tus proposiciones obscenas y desquiciadas, alejadas de todo bien y de todo mal. Alejadas de aquel beso tierno y dulce con el que todo había empezado a disolvernos.
De nuevo todo giró y mi cuerpo ya no podía estarse quieto, ya no podía concebir la calma, el silencio ni la desazón…mi mirada ya estaba perdida. Reinaba en mi sangre un fanatismo fervoroso por vencer los propios límites de tu piel y la mía.
Un paroxismo desvirtuado. Una devoción exacerbada.
Me perdía mientras sentía que se clavaban en mí, mil astillas sobre mi pubis….
Me perdía por los movimientos bestiales de tu cuerpo sobre mí.
Y entonces miré con mis ojos los tuyos, absorbiéndote ese placer bendito de estar dentro mío…girando, moviendo, penetrando…danzando…
Y la fuerza de mis piernas rodeándote para invitarte más dentro mío con más fuerza, con más gozo, más placer y más excitación.
Y la fuerza de mi bajovientre para encontrarte en ese orgasmo que me diera la vida o que me diera la muerte... que me fundiera en vos en ese solo momento en que sos únicamente mío
Y de repente mi cuerpo se paralizó, mi mirada no miró, mi pubis no ardió, tu cuerpo no danzó, y solo un grito estruendozo estremeció la tierra, un grito desvanecedor para matarme y morir. Y tu rostro perdido, confundido, extasiado…tu boca entreabierta, callada, con tanta prisión en las venas, en la fricción, en la contracción de tu miembro que expulsaba tu vida…tu vida y mi muerte.

martes, 3 de agosto de 2010

Inevitable

La primera vez que te das cuenta que no lo veras mas, que no le podrás escuchar reír, ni llorar ni darte consejos ni ánimos, que no le veras los ojitos chinos ni le sentirás las manos frías el mundo parece detenerse. Quedarse mudo. Insignificante.
Te das cuenta que nada podría ser peor. Que nada en la vida, comparado a eso, merece tu atención. Pasas días insomnes, dando vueltas contra la pared, gritando, llorando, pataleando. Estás en ese lugar al que nunca nunca querrás volver. Es el dolor más fuerte, más grande, más acaparador. Desgarrador.
Después de un tiempo, al cabo de los años, te das cuenta que cada vez lo recuerdas menos. Aunque el dolor no se haya disipado. Hay detalles de los que la memoria nos resguarda. Y no es tan fácil sentir su olor, recordar el sonido de su risa, ni su voz ronca por las mañanas ni el tacto de sus caricias.
Siento que poco a poco voy traicionándolo. Que poco a poco mi memoria va traicionándome. Por más que intento, hay días en que ya no puedo recordar algunos detalles sobre él. El tiempo va borrándome lo puntual y va dejándome lo general.
Yo solo creo que recordar a alguien es una forma de mantenerlo vivo. Olvidar es matarlo. El día en que ya no recuerdas a una persona es probablemente el día en que verdaderamente muere esa persona. Y podré olvidar mil detalles, pero jamás morirá en mí.
No miamor.

domingo, 1 de agosto de 2010

Je vous remercie monsieur

Hoy recuerdo tu facilidad para modificarme el nerviosismo en sonrisas, en tu forma de sanarme las heridas, en tus ojos por la mañana, en tu voz al otro lado del teléfono. Recuerdo todas las sensaciones de mi cuerpo cuando me contenías en una sola mano, pegada a mi cintura. Recuerdo una a una, las palabras con las que describiste a mi persona. Miro los post it en el espejo del baño. Recuerdo la noche en que te enseñé a cocinar tortillas. La dicotomía entre mandarinas y naranjas. La noche en que dibujé una sonrisa de saliva sobre tu espalda. La semana entera que habitaste en el hospital en mi postoperatorio. La barra de chocolota entera. Las confesiones a mitad de noche. Los secretos, los juegos, los veo-veo. Los viajes de silencios cómodos. Las siestas en el sillón verde que tanto amabas. El intercambio de pantuflas, en el que siempre perdías porque las mías te quedaban súper pequeñas. El aro que aun no he podido sacar y el velador que aun no he podido apagar, por miedo a que alguna noche decidas regresar y no encuentres el camino.